Desde hace mucho tiempo conozco a un chico, que por circunstancias de la vida, ha llegado a ser primo lejano mío. Nos conocemos desde niños, ya que íbamos al mismo colegio aunque no íbamos a la misma clase. Siempre nos hemos llevado muy bien, pero mi primo es un poco hipocondríaco. Si fuese por él, habría tenido esofago cancer mínimo tres o cuatro veces.
Por desgracia hace unos cuantos años que nos hemos distanciado por culpa de que se ha tenido que ir a vivir con su novia a otra ciudad, pero el otro día me he enterado de que se han vuelto a mudar todavía más lejos, no sé muy bien a donde, creo que a Aragón. Me pregunto qué es lo que se les habrá perdido tan lejos de casa. Ya ni recuerdo la última vez que nos vimos, debió de ser hace unos dos años por lo menos. Pero tenemos la suerte de que exista el whattsapp, de este modo podemos seguir hablando de nuestras estupideces de siempre en cualquier momento. Porque casi nunca tenemos una conversación normal, siempre hablamos sobre cosas extrañas que nos hacen gracia o sobre películas de los ochenta que estamos viendo y nos gusta comentarlas.
Hace ya bastantes años nos metimos los dos junto con otros amigos en un equipo de baseball que había en nuestra ciudad. Eso me sorprendió, porque mi primo no es que sea lo que se dice un deportista, cuando lo ves correr parece que se ha detenido el tiempo de lo despacio que va. Creo que va mucho más rápido cuando anda que cuando corre. Pero en el equipo nos lo pasábamos muy bien, ya que conocíamos a muchos de los integrantes del equipo de los institutos a los que íbamos.
El otro día me enteré por un amigo que tenemos en común de que había estado aquí y no me había llamado, rápidamente le mandé un mensaje, a ver qué pasaba que no me había llamado, sobre todo cuando lleva años diciendo que me tiene que dar unas cosas que tiene en casa de su madre y que ésta quiere tirar a la basura.