Todavía me acuerdo cuando era un adolescente y me empezaron a salir los primero granos a causa de acné, pero a mi por lo menos gracias a dios me salieron bastantes pocos granos, porque al hijo de uno de mis primos sí que le han salido un montón de grano de una tacada y para ponerle solución su padre ha decidido llevarle a un dermatologo acné para ver si de ese modo mejora la situación. Además en la edad en la que está este niño, el resto de los niños son demasiado crueles y no se dan cuenta de que con sus comentarios están minando la moral del niño. Eso en mi época también existía pero solo en persona, ya que en esa época no teníamos los teléfonos móviles que hoy en día tiene todo el mundo, y el acoso entre los chavales se ha recrudecido bastante por culpa de los móviles. Los móviles son bastante útiles pero también se pueden usar para hacer el mal, que es lo que vemos en la tele con bastante frecuencia pero poca gente le pone remedio. Personalmente pienso que no deberían de permitir que los niños lleven sus teléfonos móviles a los colegios, más que nada porque estoy seguro de que la mayoría de los niños se pasan las clases jugando con los móviles o viendo el youtube, porque yo si fuese ellos lo haría, menos mal que en mi época de estudiante no existían los móviles tan avanzados que hay hoy porque ya no era muy buen estudiante como para distraerme más con el móvil. Prestar atención en clase siempre me ha costado mucho y hacía cualquier cosa para pasarme las horas entretenido, menos mal que tenía un compañero de pupitre que pensaba igual que yo en ese aspecto y nos pasábamos el día pensando en juegos de mesa a los que poder jugar sin tener que molestar demasiado a la clase. Por fortuna encontramos unos cuantos juegos que nos gustaban a los dos y así nos cuando íbamos a clase, que no era todos los días.