Muchas personas tienen auténtico pavor a volar. No importa cuánto puedan razonar que, por matemáticas puras, tienen muchas más probabilidades de tener un accidente al subir a un coche que al subir a un avión. Solo pensar en que van a estar a metros sobre el suelo la sensación de vértigo hace que comiencen a sudar frío.
Si eres una de esas personas y quieres superar tu miedo a volar, los expertos aconsejan que una vez que hayas decidido afrontar la experiencia, lleves a cabo una serie de pasos para hacer que tu experiencia sea más sencilla.
Para empezar, ve en tu coche al aeropuerto, ya que así podrás parar si lo necesitas para tomar algo antes de llegar. Deja el vehículo en un Parking aeropuerto barajas en el que esté bien cuidado y puedas despreocuparte hasta el momento de llegar.
Escoge bien los asientos en los que vas a viajar. Para empezar, la mejor zona es la de las alas, ya que es donde el avión tiene una mayor estabilidad y no sentirás tanto las vibraciones. Esto hará que te encuentres un poco más seguro.
Evita los asientos de ventanilla, porque así no tendrás que ver el despegue y no aumentará tu ansiedad. Lo mejor es que cojas un asiento de pasillo para evitar tener la sensación de estar atrapado. Además, si te sientes muy ansioso y necesitas moverte, te resultará más fácil levantarte e ir hasta el baño. En cualquier caso, evita siempre el asiento central.
El interior del avión es muy similar al de un autobús, por lo que puedes imaginar que estás allí. Lleva música para escuchar con auriculares y relajarte y si viajas solo pide a algún amigo o amiga que charle contigo por mensaje a través del teléfono, así estarás más acompañado. También podrás leer o incluso ver tu serie favorita en el teléfono. Lo que sea para olvidarte de que estás volando.
Algunas personas toman una pastilla para los nervios antes de subir al avión. Si no vas a tener que enfrentarte a una reunión nada más bajar, es una buena idea porque hará que te sientas mucho más relajado. Si necesitas los cinco sentidos, una infusión puede ser de gran ayuda. Incluso, si el vuelo es largo, puedes recurrir a una pastilla para dormir para que todo pase más rápido y no te dé tiempo a ponerte nervioso.