De fácil mantenimiento, independientes y accesibles para disminuidos físicos, los bungalows o bungalós son un tipo de inmueble de creciente popularidad, especialmente compatibles con territorios de clima atlántico, como Galicia. De ahí la abundancia de bungalow islas cies, Ons y otros destinos.
Una de las ventajas de esta «casa pequeña de una sola planta», citando a la RAE, es la inmediatez de su construcción. Es común que los propietarios las adquieran ‘prefabricadas’, esto es, listas para su instalación en la parcela o recinto deseado. Con ello, se eliminan los tiempos de espera asociados a la construcción, que rondan los doce y veinte meses en la mayoría de las viviendas tradicionales.
La flexibilidad es otra de las virtudes del bungaló, estructura que puede ampliarse y reformarse con relativa facilidad. Entre las razones, destacan la sencillez de su construcción y el uso de materiales simples y naturales, como la madera.
Además, establecerse en bungalós supone simplificar las labores de limpieza y de mantenimiento, no tanto por el reducido tamaño de estas construcciones —por lo general, de planta única—, sino por el open concept con el que suelen diseñarse.
En términos económicos, los propietarios más ahorradores acertarán al elegir un bungaló. El precio de este tipo de casas es muy inferior al del resto del mercado de la vivienda. El consumo en calefacción y refrigeración también es menor.
Por otra parte, los bungalós satisfacen las necesidades de personas con movilidad reducida. Como se ha mencionado, suelen fabricarse de una sola planta, y las escalinatas del porche delantero y trasero pueden adaptarse para la colocación de rampas y barandillas especiales.
La falta de privacidad es una seria desventaja de los pisos y adosados. Invertir en un bungaló permite disfrutar de una mayor independencia, con el añadido de disponer de un terreno propio. Y es que estas viviendas, aunque pequeñas, suelen erigirse en espacios naturales.