Siempre me da un poco de pereza organizar fiestas, pero se ve que no lo debo hacer mal porque la mayoría de mis amigos me señalan cuando hay que celebrar algo. Yo recojo el guante un poco por obligación, pero es verdad que cuando me pongo manos a la obra me gusta. Al fin y al cabo, lo bueno de organizar una fiesta tú mismo es que siempre controlas la situación. Por ejemplo, el menú de una fiesta siempre gusta al organizador, porque para eso lo organiza él, ¿no?
Después de un tiempo sin reunirnos, decidimos hacer una fiesta en mi casa para los amigos más cercanos. Por supuesto, ya que es mi casa, me tocó organizar, aunque se dispuso un fondo común para los gastos. Ellos decidieron que, si sobraba algo de dinero, me lo quedará como consideración al tiempo que le iba a dedicar. Casi querían hasta pagarme, pero me negué. Lo hago por placer, sobre todo cuando me toca Comprar online surtidos de quesos franceses, italianos y suizos. Disfruto eligiendo la comida casi tanto como la música que va a sonar. Y es que estas son mis dos grandes pasiones: la música y la gastronomía, que se combinan la mar de bien en las fiestas.
Yo también hago mis pinitos como DJ y hago experimentos cuando se trata de fiestas para amigos cercanos. Y como no me gusta mucho beber, paso el tiempo detrás del ordenador mezclando música. Y cuando no, estoy atendiendo a los invitados. Desde luego que el gran problema de organizar una fiesta en casa, aunque sea para una decena de amigos, es limpiar después, pero prefiero no pensarlo cuando la organizo, porque si no, no dejaría entrar a nadie. Pero bueno, a cambio nos damos un buen atracón de delicatesen: Comprar online surtidos de quesos franceses, italianos y suizos fue todo un acierto y los amigos me felicitaron por mi habilidad para escoger el menú.
Para la siguiente fiesta ya he vuelto a salir elegido como maestro de ceremonias, pero en esta ocasión solo me comprometo si se hace en casa de otro amigo o al menos en territorio neutral. Todo lo demás lo acepto, pero volver a limpiar, no…